A veces no hace falta que algo “grave” pase para sentir que la energía no fluye.
Simplemente…
te cuesta descansar aunque estés agotadx,
te sentís más irritable, sin claridad para avanzar, o notás que evitás ciertos rincones de tu casa sin saber por qué.
Estas señales —corporales, emocionales o espaciales— pueden estar indicando energía estancada.
La buena noticia es que no necesitás grandes rituales para empezar a moverla.
Hoy te comparto una práctica simple, pero poderosa, ideal para cuando sentís que tu energía está densa o dispersa.
🌿 Mini ritual de limpieza energética: agua, sal e intención
Vas a necesitar:
- Un recipiente de vidrio o cerámica
- Agua natural (filtrada o mineral)
- Una pizca de sal gruesa o marina
- Un momento de presencia e intención clara
Pasos:
- En un espacio tranquilo, colocá agua en el recipiente y agregá una pizca de sal.
- Cerrá los ojos, respirá profundo y conectá con una intención de limpieza y renovación.
- Con el recipiente en tus manos, hacé 7 círculos frente a tu cuerpo, desde la cabeza hasta los pies, hacia tu derecha (sentido horario).
Mientras lo hacés, visualizá cómo esa agua va limpiando y equilibrando las 7 capas del aura. - Sentí que con cada círculo, algo se libera.
Si querés, podés acompañar con esta frase: “Limpio, suelto y libero lo que ya no me pertenece.
Que mi campo se renueve, liviano y en paz.” - Una vez terminado, descartá el agua por el inodoro o en la tierra, con respeto y gratitud.
✨ Afirmación para cerrar el ritual:
“Me permito sentirme livianx, presente y disponible
para lo que sí me nutre.”
🔑 ¿Querés dar un paso más profundo?
Este ritual es un gran inicio…
Pero si sentís que tu energía necesita una limpieza más integral, acompañada y consciente, te invito a conocer el Taller de Limpieza Energética Integral.
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